Joaquin Balaguer, un Estadista para la Historia

José Martí mencionó que el hombre que no posee contrincantes debe preocuparse, pues a todo árbol que da frutos se le lanza piedras.

En el chato personal Joaquín Balaguer fue poseedor de una atrayente personalidad, dotado de una sabiduría superior, con una capacidad para la exposición, orador grandilocuente, escritor, con proverbial sencillez de expresiones, claridad de dicción y expresión, persuasor eficiente, y que tenía la magia de ser comprendido por cualquier ciudadano, sin importar un mínimo sus condiciones intelectuales. Un hombre dotado de esas características consigue llegar lejos y no posiblemente no sea ferozmente atacado por sus contrincantes, los envidiosos y los insurrectos.

En el chato político, a Balaguer le correspondió gobernar en un ámbito nacional y también en todo el mundo bien difícil. La pelea de 2 ideologías antagónicas se trasladó a todas las naciones de sus respectivas influencias.

Si analizáramos al personaje partiendo de los hechos luctuosos que marcaron sus primeros 12 años, que es la arista que sus contrincantes ideológicos se han solicitado de sobredimensionar, debemos estudiar de qué forma se generaron los procesos en otros países, así como Argentina, Chile, Nicaragua, El Salvador y Guatemala, para refererir ciertos. En el primer mes del año de 1983 los gobiernos de Colombia, México, Panamá y Venezuela, se vieron precisados a detallar una instancia multilateral, famosa como Conjunto Contadora, para fomentar la paz en Centroamérica, en especial en frente de los conflictos bélicos en esas naciones hermanas que a lo largo de mucho más 2 décadas dejaron centenares de miles de muertes de personas, y que conminaban con desequilibrar toda la zona.

En la República Dominicana no hubo esta clase de enfrentamiento, pues Balaguer supo realizar una administración de gobierno en beneficio de las considerables mayorías nacionales, y que representó el arranque definitivo de pujantes clases media y también industrial, merced a las sabias disposiciones adoptadas, lo que dejó que se generara un desarrollo de 2 dígitos de la economía dominicana, a lo largo de múltiples años.

Como un capitán que trata de llevar a puerto seguro la nave del Estado en la mitad de una enorme tempestad, Balaguer supo desarrollar el país creando el aparato productivo, bajo un gobierno que actuaba como ente regulador y facilitador, y que incorporó el mucho más ambicioso programa de reforma agraria en toda nuestra historia, en la mitad de un desarrollo económico que mereció el reconocimiento de la red social en todo el mundo.

En una ocasión escuché decir a un comunicador, que Balaguer había podido llevar a cabo una aceptable obra de gobierno por el hecho de que tenía vivencias administrativas en el Estado. Esa es la definición de Estadista. Es exactamente la esencial faceta que enfocamos en esta obra que entregamos a la cuenta de todos y cada uno de los dominicanos. En el momento en que dejó las bridas del poder, había delineado proyectos y programas en todos los campos públicos, como marco de referencia a fin de que la República Dominicana se enrumbe por los caminos de avance y avance.

En el momento en que el tiempo corra el velo de las pasiones, entonces nos vamos a dar cuenta de la excelencia de Joaquín Balaguer, que supo desarrollar el país y resguardar nuestros elementos naturales, sin traumas, en la dirección del avance y la prosperidad.