Seducciones Encubiertas: Una novela romántica de pecados ocultos y deseos desenfrenados

Emma es asignada a una mansión de gente de investidura para trabajar como servidumbre pero al comienzo no se transporta bien con los dueños de tan flamante casa quienes fungen como sus amos.

Solo halla consuelo al llevarse bien con Leandro, el maestresala serio, Érica, la chef, y Baco, el sirviente sordomudo.

Nada simple para esta muchacha llevarse mal con quienes le darían prácticamente de comer.

Pese a no llevar una relación muy divertido con sus jefes, hay una atracción realmente fuerte de Tomás, entre los dueños, hacia Emma que cada vez se hacía mucho más visible, y que irremisiblemente no iba a poder contener a lo largo de bastante tiempo.

Esta historia se desenvuelve cerca de varios siniestros para esta muchacha quien además de esto es doblegada a vejaciones por esas personas de clase, amistades, etcétera, de la mujer del hombre que sería contradictoriamente el cariño de su historia.

Todas y cada una estas ocasiones van a llevar a Tomás a confesarle a Emma qué atraído se siente por ella y cuánto estaría presto a poner en riesgo para hacer una relación que a los ojos de la alta sociedad no estaría bien vista.

La intriga y el secreto van a ser una parte de los pilares de esta historia, donde una herencia está en juego, envuelto además de esto por la traición recíproca de estos esposos que aparentaban una felicidad que no sería tan alguna, en el momento en que Emma se cruce indudablemente en el corazón de Tomás hasta llevarlo a cabo caer en las tentaciones mucho más peligrosas que quizás concluya desembocando en lo que sería el auténtico amor.

¿Van a poder ser contentos al final sin nada que los opaque pese a la diferencia popular de los dos?…