SECRETOS

Una vez alguien me mencionó que el castigo es como un hilo fino con el que te anudan y después van estirando, aflojando… Para ellos es como un juego pero te llega a anular. Es mucho más simple juzgarnos a nosotras por el hecho de que somos mucho más perceptibles. Hay que estar ahí, con quien lo padece, pero sin evaluar.Va a haber varios puntos en común con las historias de otras mujeres maltratadas pues todas y cada una pasamos por fases similares (no estimar verlo al comienzo, disfrazarlo…). Mi intención en el libro es poner hincapié en que o sea cosa de todos. Y no es una oración llevada a cabo. Hay que romper tópicos tanto de la víctima como de la persona que viola el castigo y enseñar la soledad a la que te encaras en el momento en que tomas medidas legales contra lo que andas viviendo. De todo lo mencionado hablo en el libro que al comienzo les puede parecer una vida de lo mucho más habitual, a fin de que todas y cada una de las mujeres que estén en la situación sepan a eso que van a confrontar pero, más que nada, a fin de que den el paso.