Wyatt

Wyatt es un ladrón veterano. Imperturbable y enigmático, tiene en su agenda un hurto de joyas de los que le agradan: ni muy extravagante ni bastante ambicioso. Solo debe controlar a Alain LePage -un popular correo «portamaletines» cuyo trabajo es acompañar la mercancía en tránsito para entonces ocultar en el momento en que esta es entregada- y hallar el más destacable instante para hacerse con el botín.

Si bien Wyatt elige trabajar solo, este encargo se lo da Eddie Oberin, un viejo popular del ramo