Viaje extraordinario al interior de su cerebro: Con todo, una aventura fascinante

¿Le agradaría viajar a las profundidades de su cerebro, no el de otro señor que a entender quién es y que quiere, sino más bien el suyo, entender de primera mano la actividad de sus ochenta y seis mil millones de neuronas, cuáles se escaquean y cuáles no? ¿Le agradaría entender qué medida tiene su corteza y si es mucho más grande que la de sus compañeros de oficina o sus cuñados? ¿Es verdad que parte importante de su cerebro es reptiliano y por consiguiente totalmente idéntico al de una lagartija, o que un grupito de sus neuronas están de forma exclusiva dedicadas a Jennifer Lawrence? No nos conteste. No es necesario. Si está leyendo o sea que disponemos merced a una argucia legal su expreso permiso para arrancar juntos un increíble viaje al interior de su cerebro, el que empezará ahora mismo, tan rápido pase por caja y pague el libro. De entrada entendemos en tanto que es usted muy capaz, tal se prosigue de escogernos y hojearnos. ¿Cuántas mucho más sorpresas nos esperan en esta impresionante aventura? Mira que tuvimos suerte. Podríamos haber dado con otro señor con un cerebro mucho más chato y predecible. Pero no. Dimos con usted, merced a Dios y a una portada resultona y bien currada. Abrase sin temor. Entre en su cerebro con la ilusión del niño que entra en un gozoso y excitante parque temático, todas y cada una en desempeño. Vea qué complejo y bien ordenado está todo allí dentro y como esas cientos de millones de neuronas se regulan y organizan a fin de que usted piense y razone, y calcule y sopese y disfrute con el arroz a banda o los festivales de Eurovisión. Venga. Saque la Visa y remate. Nos lo pasaremos bomba.