Trilogía de la Nube blanca (En el país de la nube blanca | La canción de los maoríes | El grito de la tierra)

Una edición omnibus con los volúmenes de la trilogía «Nube Blanca»: En el país de la nube blanca, La canción de los maoríes y El grito de la tierra.

Una epopeya impresionante, sugerida por la crítica y los libreros, sobre 2 familias cuyo destino está unido para toda la vida, en el exótico marco de Novedosa Zelanda.

En el país de la nube blanca
Londres, 1852: 2 chicas emprenden la travesía en barco hacia Novedosa Zelanda. Para ellas significa el comienzo de una exclusiva vida como futuras esposas de unos hombres a quienes desconocen. Gwyneira, de origen noble, está prometida al hijo de un magnate de la lana, al paso que Helen, institutriz de profesión, respondió a la petición de matrimonio de un granjero.
Las dos van a deber continuar su destino en una tierra a la que se equipara con el paraíso. Pero ¿encontrarán el cariño y la alegría en el radical contrario de todo el mundo?

La canción de los maoríes
Novedosa Zelanda, 1893. Elaine es la interesante nieta de Gwyneira, quien un día viajó desde el radical contrario de todo el mundo para casarse con un irreconocible. De su abuela ha heredado la melena pelirroja y el espíritu libre... hasta el momento en que William, un enigmático irlandés, penetra en su historia y ella cae rendida a sus encantos. Pero entonces, la llegada de su prima Kura, con su sensualidad maorí, cambia el destino de Elaine, y las dos deberán confrontar a sus resoluciones y a los vaivenes de una tierra equiparada con el paraíso.

El grito de la tierra
Novedosa Zelanda, 1907. La niñez de Gloria, bisnieta de Gwyneira, acaba ásperamente en el momento en que es mandada al lado de su prima Lilian a un colegia en Enorme Bretaña. Una vez allí, Lilian encaja en las prácticas que impone en Viejo Planeta, pero Gloria desea regresar a toda costa a la tierra que la vio nacer, en el radical contrario de todo el mundo. Y es ese profundo sentimiento el que la empuja a coger las bridas de su historia y también idear un audaz plan que va a marcar su destino para toda la vida.