El tren de los niños (Biblioteca Formentor)

Nápoles, 1946. El Partido Comunista italiano logra mover a setenta mil pequeños con la intención de que se alojen por un tiempo con familias del norte y conozcan una vida diferente lejos de la pobreza que los circunda. El pequeño Amerigo se ve forzado a dejar su vecindario y sube a un tren al lado de otros pequeños del sur.
Con la mirada acerada de un chaval de la calle, Amerigo nos sumerge en una Italia impresionante que regresa a levantarse en la posguerra y nos confía el relato conmovedor de una separación, de un mal que marca a fuego, mientras que nos ordena a pensar, delicadamente y maestría, sobre las resoluciones que terminan transformándonos en lo que somos.
Viola Ardone firma entre las novelas mucho más destacables de los últimos tiempos: ha seducido a centenares de miles de leyentes y a la crítica, cautivada frente a una historia inusual, genuina y universal que recuerda a las de enormes nombres como Elsa Morante o Elena Ferrante. Inspirada en hechos reales, la fuerza de esta red de solidaridad en tiempos bien difíciles hizo que esta novela se transforme además de esto en un fenómeno en todo el mundo en veinticinco países.