Tiempos salvajes (Yeruldelgger 2)

Ian Manook vuelve a Mongolia y a su atractivo comisario, Yeruldelgger.

País de fuertes contrastes, donde las tradiciones ancestrales y la espiritualidad conviven con la mafia y el delito ordenado, Mongolia es de nuevo personaje principal de esta vibrante novela que afianza a su creador como entre las voces mucho más auténticos del noir en los últimos años.

En la mitad de las heladas estepas mongolas, la inspectora Oyun, ayudante del comisario Yeruldelgger, se encuentra con una escena bien difícil de interpretar: un jinete y su caballo yacen aplastados bajo el lomo de una hembra de yak que semeja haber caído del cielo. Exactamente la misma sorpresa experimenta su jefe en el momento en que, en un desfiladero del macizo del Otgontenger, se revela el cadáver de un hombre que solo probablemente halla acabado ahí... precipitándose desde las alturas. Y para cerrar el círculo de hechos inusuales, exactamente el mismo comisario es detenido como sospechoso del asesinato de Colette, una amiga prostituta a la que había ayudado a rehacer su historia.

Sumido en la perplejidad y temiendo ser víctima de una trampa, Yeruldelgger acomete una investigación furtiva que producirá tensiones con su equipo, reabrirá viejas lesiones con su hija Saraa y provocará la intervención de los profesores shaolin del séptimo monasterio en el que fue criado.

Pero la situación da un vuelco terminado con el descubrimiento de los cuerpos sin vida de un conjunto de pequeños en un contenedor en el puerto de El Havre. Más allá de los una cantidad enorme de km que apartan Mongolia de Francia, las pistas terminarán por cruzarse para destapar un caso de corrupción y abusos a todos y cada uno de los escenarios que perjudica a las mucho más categorías superiores de distintos países, desde Europa hasta Asia.

La crítica dijo...
«El creador juega con capacidad en múltiples niveles para crear un thriller, que es asimismo una novela de suspense, acción y aventuras. [...] Esta segunda distribución de Ian Manook es tan vibrante, envolvente y espesa como la primera.»
Mediapart

«Sin dudas, Yeruldelgger se ha unido a la familia de viejos policías golpeados por la vida, irritables y solitarios como Wallander y Erlendur. Pero su constructor, Ian Manook, no ha dudado en impulsar su carácter para llevarlo a cabo claramente singular.»
Les Échos

«Un dominio insolente del suspense. Un thriller XXL.»
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