¡La sopa! (La pequeña filosofía de Mafalda)

La pequeña indignada mucho más conocida de todo el mundo piensa sobre los enormes temas de la vida.

Mafalda se hace muchas cuestiones, demasiadas cuestiones que de manera frecuente irritan y sobrepasan a los que la cubren. Nuestra pequeña indignada se cuestiona los temas universales y comparte sus medites sobre el planeta.

Mafalda odia la sopa y demanda siempre y cuando puede los problemas que tiene sobre la salud y sobre el humor de la gente prudentes. Comer sopa va en oposición a sus principios pero en esta ocasión tiene las de perder, y deberá estudiar a tragarse su frustración a medidas de cuchara.

«La sopa es a la niñez lo que el comunismo a la democracia.»

La crítica dijo...
«Quino, el grande Quino, proseguirá vivo en su Mafalda, que nos enseñó que, como siempre y en todo momento, lo urgente no deja tiempo para lo esencial.»
Héctor Abad Faciolince

«Jamás he amado a una mujer que no haya amado antes a Mafalda.»
Manuel Jabois

«Qué esencial has sido en nuestras vidas. [...] Siempre y en todo momento estaban tus viñetas dando sentido a los datos absurdos de la vida y la sociedad. Cada lección era un guiño de risa discreta que se volvía carcajada y suspiro, filosofía pura, crítica popular, lenguaje de movimientos expresivos y pequeños datos, el humor mucho más refinado concentrado en los dibujos. Qué enorme compañero has sido.»
Ana Merino

«Las novedosas generaciones prosiguen leyendo a Mafalda con regocijo. No es un fácil vestigio del pasado o un recuerdo nostálgico, sino más bien un personaje vivísimo que prosigue incendiando conciencias y fomentando el inconformismo.»
Rafael Narbona, El Cultural

«Como Charlie Brown o Nancy, Mafalda es un instrumento para proyectar, a través de la niñez, las miserias de los mayores y las contradicciones de este valle de lágrimas. ¡Aleluya!»
Vicent Sanchis, Catorze

«Con ustedes, la filósofa con lacito con la que crecieron múltiples generaciones, [...] la Greta Thunberg de la historieta. [...] Por su espíritu contestatario, humor cuchillero y costumbrismo con guiños progres, Mafalda nunca va a pasar de tendencia. [...] Quino se ganó la inmortalidad y los fanáticos de las viñetas una heroína para todos y cada uno de los públicos. Una que, a la que te desatiendes, te suelta en plan filósofa: "¿Qué te agradaría ser si vivieses?"»
El Planeta

«Mafalda, esa pequeña que, a esta altura, ahora habría de ser Patrimonio de la Humanidad. Básica para la vuelta a la rutina.»
El País

«No posee relevancia lo que yo pienso sobre Mafalda. Lo esencial es lo que Mafalda piensa de mí.»
Julio Cortázar

«Mafalda es una heroína de nuestro tiempo.»
Umberto Eco

«Pienso que, adjuntado con El Eternauta, Mafalda es la historieta mucho más influyente. Es un icono argentino como el alfajor, Fangio, Gardel o el Obelisco. Mafalda está en el inconsciente argentino.»
Liniers

«Por fortuna, no me puedoimaginar a Mafalda sino más bien como la divertida pequeña que fue, es y va a ser siempre y en todo momento. Los individuos de historieta tienen ese privilegio (enarbolado por Peter Pan) de no envejecer.»
Roberto Fontanarrosa

«Mafalda es, digámoslo de una vez, mucho más humana que varios humanos.»
Román Gubern