La sociedad cómplice: Los mitos económicos que llevaron a la Argentina a la decadencia y qué hacer para corregirlos

La sociedad cómplice es un ensayo sin anestesia, que examina la verídica Argentina, aquella que se oculta tras las ideas falsas que nos sirven de explicación para no seguir y no admitir los inconvenientes reales. José Luis Espert se hace cargo y las rebate, exponiendo qué pasó verdaderamente y qué deberíamos realizar a fin de que la economía ande terminantemente.

Vivir en la Argentina no es moco de pavo. Trabajás mucho más de medio año para abonar impuestos. Te fuerzan a obtener muy, muy caro. Tu salario es una pobreza y se evapora con la inflación. Te proponen servicios públicos del Tercer Planeta. No caminás relajado por la calle pues tienen la posibilidad de robarte el celular, que igual te sirve de poco por el hecho de que la señal es pobre. Dormís mal, preocupado por tus hijos. Te cortan la calle en el momento en que vas a trabajar. Los sindicalistas que dicen defenderte viven como magnates y los políticos que dicen cuidarte amasan fortunas. Los hombres de negocios que dicen ofrecerte trabajo generan recursos pésimos que te cobran a precio de oro. Nuestra moneda perdió trece ceros en 22 años. Pensémoslo de esta forma: la área de la Argentina es de 2.780.400 km cuadrados. Si estuviese cubierta con baldosas de 52 centímetros, tras perder esos trece ceros nos quedaríamos con solo una baldosa. La culpa es nuestra pues adquirimos mitos: el déficit fiscal, el peronismo, la hiperinflación, el Rodrigazo, la crisis de 2001, las jubilaciones, entre otros muchos.

«La sociedad cómplice hace un paseo bien terminado de las opiniones y solicitudes de una historia económica tan tediosamente repetida que va siendo hora de que alguna generación sospeche que hay algo malísimo en de qué forma se enseña al planeta y al propio país. Esta obra podría titularse 'Todos entendemos lo que hay que llevar a cabo', por el hecho de que su foco lo realiza evidente».
José Benegas, analista político