Si hubiese un mañana

La vida de Paige Valois parecía ir en picada. Su reputación de problemática princesa del pop había hecho mella al punto de amenazar su ahora precario futuro económico. Sin salida, ella admite el salvavidas que le lanza su agente en forma de ultimátum si desea salir a flote nuevamente. Debe realizar todas y cada una de las demandas de un reconocido sello discográfico o puede descuidarse de la industria del diversión musical para toda la vida. ¿De qué forma negarse en el momento en que no solo su historia profesional pende de un hilo, sino más bien asimismo la seguridad de su manipuladora familia?

Blake Howard estuvo destinado a la industria del diversión desde el momento en que tiene memoria. Tras generaciones de músicos en su histórica familia, él es el primero que se dedica al negocio sin estar en un ámbito. En el momento en que su mejor amigo, Josh Daniels, le solicita que considere ofrecerle una ocasión a la estrella caída en desgracia, Paige Valois, en su sello discográfico, Blake no puede rehusarse pues le debe un enorme favor a Josh. No obstante, Blake va a hacer todo lo que es posible a fin de que ella infrinja las condiciones establecidos. El día en que se da cuenta de quién es la auténtica Paige, tras ese planeta de encanto y luces, va a ser muy tarde para el corazón de Blake.