Retrato de un navío

El título exuda deliberada meditación, por el hecho de que no es poca ventura que a tus manos llegue un libro como este sobre el navío Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, señero personaje principal de la carrera Manila-Acapulco. Observemos por qué razón. Frente todo, por su carácter de primicia. Hasta la actualidad no hubo quien osara escarbar en el fárrago reportaje que ocultaba sus orígenes, avatares y desaparición determinante.

Seguidamente, la presente obra forma un acopio inverosímil de datos con su intricada urdimbre que únicamente un espíritu avizor y perito fuera con la capacidad de desentrañar con tal maestría que lo que, de de el, es bien difícil y recóndito para el profano, se torna diáfano y comprensible, lo que acrece el interés del lector y cautiva su atención. Ignoti nulla cupido, según reza el apotegma tradicional. Ya que bien