Mi profe de reli

Un joven de 16 años se inscribe en una escuela concertada para estudiar bachillerato. Allí cursará, por vez primera, la materia de Religión. El primero de los días de clase, el instructor planteará a sus estudiantes redactar, a lo largo de todo el curso, un períodico semanal ahondando en lo que se mencionó en clase. Mediante ese períodico, vamos a conocer los temas tratados en el sala y las explicaciones del instructor, pero nos adentraremos, asimismo, en las experiencias del joven y en sus diálogos privadas con el instructor, abordando cuestiones como el mal, el cariño y el desamor, la patología, la desaparición, la oración, la independencia, la solidaridad, la transcendencia… Todo ello, sin rehuir temas controvertidos sobre los que los jóvenes interrogan a la Iglesia o, de manera directa, se oponen a ella, como la homosexualidad, el celibato sacerdotal, el sacerdocio femenino, el divorcio y las segundas nupcias de los divorciados. En el final, la relación establecida con el instructor resultará tan didáctica o mucho más que las horas de clase.