Paso a Paso: Razones para subir montañas

¿Alguien se ha preguntado en algún momento qué incentiva a escaladores aproximadamente expertos a escalar cimas, a correr peligros, a padecer eso que «si me manda mi madre, no lo hago», a quedarse perplejos en el «quién me mandaría a mí»? ¿Qué aloja esa pasión, inconcebible para los que solo sacamos a pasear al perro o nos abrazamos al cojín del sofá en las tardes de domingo mientras que observamos, al calor del hogar, la que cae fuera? Pasito a pasito nos adentra en la reflexión personal de un tipo que busca en las cimas lo que no le proporciona el suelo. Un artículo que arma la reflexión sobre el planeta (pues para eso el personaje principal es pensador) con la experiencia personal física, pasando por el mal, y sensible, deteniéndose en el temor (por el hecho de que para eso es de carne y hueso). Una metáfora, quizá, sobre la vida y la desaparición, sobre nuestros sueños y nuestras motivaciones íntimas, desplegada en una narración letrada, honesta, enternecedora y emocionante para no iniciados, y no de ahí que menos reveladora para los montañeros, que identificarán indudablemente esa necesidad inexplicable de subir montañas. A los del sofá, prácticamente, prácticamente nos persuade. Es que… Y para los sumergidos en este vicio, resulta una gozada para el cuerpo y los sentidos. Una apuesta literaria inopinada y también capaz en el panorama español de hoy.

M.ª del Mar Sánchez Muñoz