Mientras dormían (Biblioteca Formentor)

La presencia del comisario Guido Brunetti se ve modificada por la irrupción en su historia de determinados elementos religiosos inquietantes. En el transcurso de un almuerzo familiar revela que las clases de religión que recibe su hija, la joven Chiase, son dadas por un sacerdote que da signos de un accionar poco menos que inapropiado. Al tiempo, una monja que Brunetti conoce (Vestido para la desaparición) llega a la questura de Venecia para mostrar sus supones sobre las situaciones de la desaparición de unos jubilados en una vivienda. En una aventura, la sexta que protagoniza el comisario, empapada del pesimismo que envuelve a Venecia, Brunetti se encara a poderes que se creen sobre la ley de los hombres, por el hecho de asentarse sobre un entramado de intereses de tipo económico y también ideológicos. La acerada mirada de Donna Leon demanda esta vez las malvadas prácticas sexuales que hacen ciertos integrantes de la Iglesia Católica, tal como la corrupción que perjudica a las esferas mucho más predominantes de la institución frente al Papa.