Matar es fácil (Espasa Narrativa)

En el lapso de un viaje en tren, Luke Fitzwilliam se sienta al lado de la anciana señorita Pinkerton, quien le enseña que en el pueblo de Wychwood tienen sitio una sucesión de homicidos, supuestamente excelentes, y le confía sus supones sobre que la próxima víctima va a ser el doctor Humbelby.

Fitzwilliam no toma en cuenta los miedos de la anciana hasta el momento en que, al día después, lee en el diario que el doctor Humbelby ha desaparecido y la señorita Pinkerton fué arrollada por un vehículo cerca de una comisaría.

¿Fácil coincidencia? Para descubrirlo, el señor Fitzwilliam escoge moverse al enigmático pueblo para, una vez allí, conocer que no solo está lleno de misterios, sino más bien que, escondido entre todos ellos, aguardando el instante perfecto para regresar a accionar, está el asesino.