Manifiesto Socialista: Por una política radical en un mundo que se volvió invivible (Biblioteca Básica del Pensamiento Socialista)

¿Qué viene a decirnos un manifiesto socialista en instantes en que esa tradición está desgastada a escala global? Anunciado en los USA en 2019 y transformado de manera rápida en un tradicional en los círculos de la izquierda anglosajona, el Manifiesto Socialista es un llamado a meditar la política con nuevos ojos en frente de un capitalismo poco a poco más depredador. Su creador, editor de la reconocida gaceta Jacobin y exponente de la renovación del socialismo en su país, hace una apuesta doble: convencido de que la historia importa para ofrecer sentido a las luchas recientes, muestra una síntesis de las contradicciones y los descalabros de las revoluciones marxistas y los proyectos reformistas del siglo XX. Y avanza con la iniciativa de relanzar el socialismo en clave democrática, con políticas redistributivas, aptitud de organización desde abajo y confrontación capaz –y tenaz– con las elites.
Nativo de 1989, año en que cayó el socialismo real, Bhaskar Sunkara traza un cómputo desenfadado del enorme relato del marxismo, como primer insumo crítico para crear una socialdemocracia revolucionaria que no se contente con ser la cara amable del neoliberalismo. Libre de jerga academicista pero apoyado en una literatura sólida y actualizada, Sunkara cuenta la capacitación de los partidos obreros del siglo XIX y los logros de las luchas sindicales, el accidentado desarrollo soviético y los avatares de la socialdemocracia europea, los avatares de la revolución china, las revueltas de los años sesenta y setenta y el repliegue defensivo de las izquierdas desde los ochenta. Por instantes, el relato se detiene para poner el foco en ciertos de sus enormes personajes principales: Karl Marx, Lenin, Rosa Luxemburgo, León Trotski, Olof Palme y Mao Tse-tung, cuyas trayectorias se cuentan sin el peso de la descalificación ética y bajándolos a tierra, ahí donde han tomado resoluciones y se confundieron.
El Manifiesto Socialista es, de esta manera, un paseo histórico emocionante que acerca las luchas del pasado a las generaciones de millennials y centennials, pero asimismo una revisión crítica, sin solemnidad y sin rigidez, de las promesas emancipadoras del siglo XX. Y más que nada, una convidación a la construcción política, que tiene bastante que dar a los progresismos latinos y al campo heterogéneo de las izquierdas.