Descarga tu Libro en Diversos Formatos:
Éste Libro se Encuentra GRATIS en Amazon.
Ciertos pequeños:
No tienen idea de qué forma mencionarle a sus progenitores que, desde hace ya tiempo, sospechan la realidad.
Se sienten angustiados por el hecho de que no desean defraudar la ilusión que aún ven en los mayores.
Pero, en el momento en que se les cuenta la realidad: se desilusionan y se lo toman a mal.
Ciertos progenitores:
Ven llegar el instante, pero no tienen idea de qué manera encararlo, y lo retardan.
No desean oír aquello de “papá/mamá, me habéis mentido”.
No quieren vivir el desengaño y enfado de su hijo. Les resulta muy
triste el desenlace de la magia.
Pero, al tiempo, tienen temor a que su hijo sea el único de la clase que
no sepa la realidad y se rían de él.
¡Y qué frío es eso de: “sí hijo, los RRMM son...”!
No tienen idea de qué forma mencionarle a sus progenitores que, desde hace ya tiempo, sospechan la realidad.
Se sienten angustiados por el hecho de que no desean defraudar la ilusión que aún ven en los mayores.
Pero, en el momento en que se les cuenta la realidad: se desilusionan y se lo toman a mal.
Ciertos progenitores:
Ven llegar el instante, pero no tienen idea de qué manera encararlo, y lo retardan.
No desean oír aquello de “papá/mamá, me habéis mentido”.
No quieren vivir el desengaño y enfado de su hijo. Les resulta muy
triste el desenlace de la magia.
Pero, al tiempo, tienen temor a que su hijo sea el único de la clase que
no sepa la realidad y se rían de él.
¡Y qué frío es eso de: “sí hijo, los RRMM son...”!
Descarga tu Libro en Diversos Formatos:
Éste Libro se Encuentra GRATIS en Amazon.