Los rebeldes

Sándor Márai publicó esta novela en el momento en que tenía treinta años y terminaba de regresar a Hungría. Si bien ahora era popular como escritor de talento, Los rebeldes ocasionó un enorme encontronazo y terminó de consagrar a su creador, que empezaba entonces uno de sus periodos creativos mucho más intensos y fértiles.

Solamente unos meses antes del final de la Primera Guerra Mundial, 4 jóvenes terminan sus estudios y se combaten al último verano de la adolescencia. En cuestión de semanas van a ser llamados a filas y mandados adelante, un frente del que solo llegan novedades deplorables.

De este modo, unidos por su aversión a eso que asegura ofrecerles la madurez, Tibor, Ábel, Erno y Béla crean un cosmos especial y juegan a retar todas y cada una de las reglas: toman y fuman en demasía, juegan a las cartas, se idean peculiares historias, cometen pequeños robos...

Frente a la sepa de progenitores, tíos y hermanos mayores, efectúan su aprendizajede la vida libres del control familiar, hasta el momento en que la aparición de un improvisado guía, un avieso actor que está de paso en la localidad, va a hacer que sus juegos, y sus vidas, se precipiten por caminos nunca pensados que los van a llevar hacia un dramático desenlace.