Las alas de la esfinge (Comisario Montalbano 15)

Llega la decimoquinta aventura del comisario Montalbano.

Camilleri dibuja con muy fino aspecto los desvelos íntimos de su popular personaje, que en pleno enfrentamiento amoroso y existencial se extiende en un afilado diálogo consigo.

Tras lo acontecido en Ardores de agosto, la relación entre Montalbano y Livia dió un giro tan pronunciado que Salvo se halla sumido en un mar de inquietudes, presa de un profundo desasosiego que el correr del tiempo no semeja sino más bien agudizar.

En tal estado anímico está el comisario en el momento en que una llamada de Catarella lo ordena a zambullirse en la investigación de un delito. Ha aparecido el cadáver desvisto de una muchacha, y la única pista sobre su identidad es un tatuaje en la espalda que representa una pequeña esfinge, una mariposa nocturna. En el momento en que la imagen se propaga por televisión, Montalbano y sus asistentes van a ir tirando de un hilo que los va a conducir hasta La Buena Intención, una asociación beneficiosa apoyada por esenciales individuos cuya aparente misión es redimir a chicas de la calle y guiarlas por el buen sendero. No obstante, al comisario mucho más popular de Italia las buenas pretenciones de la dichosa asociación enseguida le huelen a estiércol, cosa que irremisiblemente lo mete en un óptimo lío en el momento en que su jefe le reprocha caminar estudiando a personalidades irreprochables. Pero el olfato de Montalbano puede mucho más que la flagrante incompetencia de sus superiores, lo que lo va a llevar a vérselas con novedosas y atroces manifestaciones del delito ordenado.

Con mano profesora, Andrea Camilleri prosigue dibujando con trazo fino los desvelos de su popular personaje, en pleno enfrentamiento amoroso y existencial. Sus teatrales excesos y espectaculares tácticas para sonsacar información pertenecen a su persona tanto como su sabiduría de zorro viejo, su sentido del humor o su golosa sensualidad. Si bien parezca bien difícil, con cada novedosa distribución de la serie Montalbano se sobrepasa a sí.

Reseña:
«Camilleri ha conocido ocupar un vacío endémico en la literatura italiana moderna, el de una narrativa de diversión de prominente nivel que favorezca el exitación de la lectura sin recurrir a lo banal ni a lo fácil.»
L'Espresso