Impactos de la COVID-19 en el sistema internacional y en la integración regional

Son variadísimos los cambios que la covid-19 va a traer en la pospandemia, la que va a ser una dura etapa de restauración de los profundos estragos que deja el coronavirus y se va a depender de las resoluciones que tome la raza humana, si van a ser en la mayoría de los casos convenientes con la construcción de un ambiente mucho más cooperativo y solidario o si se agrandarán aún mucho más las diferencias entre países desarrollados y desarrollandose y entre estratos sociales. Un ajuste muy aguardado es en el modelo económico de apertura económica, en el que es de nuevo esencial un enfoque poskeynesiano de Estado de confort que deje atender políticas públicas escenciales, como la de la salud, aun, en naciones desarrolladas como las de América del Norte, acompañado de prácticas de gobernanza multinivel triunfantes en América Latina como la conseguida en Uruguay con medidas regionales funcionales de salud pública que recobren la llegada de la institucionalidad. En cambio, la situación es complicada hoy en dia en países como Brasil, por el desconocimiento de la gravedad de la pandemia. Por otro lado, los que sí van a tener desarrollo acelerado son los avances en tecnología, en los que la IA (inteligencia artificial), apoyada en la robótica, la big data y el Internet de las cosas, contribuirán desde el disputado liderazgo entre USA y China y desde el avance en nuestra América Latina a ser herramientas para supervisar mejor el coronavirus. La digitalización impactará campos industriales claves como el automotriz, en procesos de integración como Mercosur o la tecnología financiera (Fintech) estimulará el avance del emprendimiento y una mayor inclusión financiera en América latina. Por último, los cambios en el sistema en todo el mundo influyen en áreas del mundo tan distintas y alejadas como el Medio Oriente.