La huella de la ira

4 jóvenes al calor de una mesa de póquer barajan, en su inconsciente, sus opciones de futuro. Uno valora la oportunidad de buscar un tesoro, que los viejos dicen quedó oculto bajo los escombros de una iglesia arrasada por un terremoto hace varios años. Pero un irreconocible se le ha adelantado y empleará métodos poco ortodoxos para procurar conseguir semejantes recursos. Las relaciones sociales en la pequeña aldea se van a ver perturbadas en el momento en que el pasado oculto hasta la actualidad empieze a aflorar. Un viejo ricachón, amigo de los jóvenes, va a ayudar a desentramar el extraño tema que ha entrado de sopetón en el pueblo. Un secuestro, una muerte extraña, un personaje siniestro... ¿de qué manera relacionarlos entre sí?
Prácticamente un siglo antes, un sacerdote deshonesto y una chica un poco rebelde ponen la primera piedra de esta aventura. No dudarán en emplear la patraña, el hurto o el homicidio para escaparse con la suya, forjando un futuro en el que las piezas, de a poco, volverán a su lugar.
Una novela que medra en intensidad, una historia que engancha, un libro para divertir.