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El depredador en el alma extendió alas negras y esto, habiendo suprimido la corrosión de la vergüenza no peor que el ácido sulfúrico corrió a la chica que de manera rápida anduvo por la acera obscura.
En la calle atestada redujo la agilidad, hombros enderezados — relajado, habiendo decidido que el mucho más horrible detrás.
No sospechó que en el recorrido "de improviso" lo tiró del que da: asistieron por la tentación tanto el aire de mar fresco, como una brisa sensible y una indirecta ilusoria a bienestares carnales.
Cambió el precaución frecuente y los pies en el suelo, no miró el reloj y no vio ese tiempo ahora después. Tomó la resolución al momento — tiró la falda corta corta que encaja una remera rosada y se agotó en la calle, lista para desvanecer la melancolía de invierno en la noche de la primavera de improviso ardiente.
Tuvo precaución de que no miró ni por varias horas, ni en el calendario que está parado en un ayudante de camerino en un pasillo y sobre que su asamblea ocurrió, pero solventó hace múltiples días: cualquier abuso de los talentos, cualquier ortografía de amor instantánea.
El día de hoy deseó gozar de la seducción natural.
Se paró en la galería de la minialameda abierta que duró de la calle que se enrosca y puso una pierna sobre el paso inferior de la conducción de la escala para pescar el lugar de comidas.
En la calle atestada redujo la agilidad, hombros enderezados — relajado, habiendo decidido que el mucho más horrible detrás.
No sospechó que en el recorrido "de improviso" lo tiró del que da: asistieron por la tentación tanto el aire de mar fresco, como una brisa sensible y una indirecta ilusoria a bienestares carnales.
Cambió el precaución frecuente y los pies en el suelo, no miró el reloj y no vio ese tiempo ahora después. Tomó la resolución al momento — tiró la falda corta corta que encaja una remera rosada y se agotó en la calle, lista para desvanecer la melancolía de invierno en la noche de la primavera de improviso ardiente.
Tuvo precaución de que no miró ni por varias horas, ni en el calendario que está parado en un ayudante de camerino en un pasillo y sobre que su asamblea ocurrió, pero solventó hace múltiples días: cualquier abuso de los talentos, cualquier ortografía de amor instantánea.
El día de hoy deseó gozar de la seducción natural.
Se paró en la galería de la minialameda abierta que duró de la calle que se enrosca y puso una pierna sobre el paso inferior de la conducción de la escala para pescar el lugar de comidas.
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