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A Felipe el Precioso le brindaron matarile. Juana la Desquiciada no se encontraba desquiciada. Y mucho menos de amor. Isabel la Católica envenenó a su hermano. Entonces dio un golpe de Estado y montó una guerra civil para legitimarse. Isabel tiene tantas opciones de ser bastarda como su sobrina Juana, nick la Beltraneja.
No tenemos ganas mentir a absolutamente nadie. Este libro puede herir sensibilidades. Si consideras que Isabel la Católica era una santa, o que ella y su marido forjaron la excelencia de España, este no es tu libro. Aquí venimos en son de guerra, a ofrecerle patadas al árbol de cartón piedra de la historia oficial. Contaremos esta historia a nuestra forma, a fin de que todo el planeta la comprenda.
Felipe el Bello fue el primer rey de la dinastía de los Austria. Llegó a Castilla para reinar y se lo cargaron antes de resultar rey de Aragón. Más allá de que es un tipo esencial, entendemos poquísimo de él. Semeja que la historia oficial se ha saltado esta página.
A lo destacado es que se han olvidado un tanto a posta. El reinado de Felipe I es un fastidio, especialmente si comulgas con eso de que Isabel y Fernando unieron España. Por el hecho de que, veremos, en el momento en que muere Isabel, el trono de Castilla lo hereda su hija Juana. Fernando prosigue vivito y coleando en su trono de Aragón. Ahí es donde nos ronda la mosca tras la oreja. Por el hecho de que eso de que haya 2 reyes diferentes nos suena a que prosiguen estando 2 reinos: el de Castilla para Juana y el de Aragón para Fernando. El los pies en el suelo nos comunica que no: los reyes católicos no unieron España. ¿Va a ser de ahí que que Felipe el Precioso es tan molesto?
Estudiamos el homicidio de Felipe el Precioso, descubrimos al asesino, desvelamos sus fundamentos y, de propina, nos remontamos al reinado de los reyes católicos, para comprender el contexto y dejarnos el lujazo de contar lo que las series no te cuentan.
Posiblemente al terminar este libro no sepas a dónde vamos. Pero corres el peligro de comprender de dónde venimos. ¿Nos acompañas?
No tenemos ganas mentir a absolutamente nadie. Este libro puede herir sensibilidades. Si consideras que Isabel la Católica era una santa, o que ella y su marido forjaron la excelencia de España, este no es tu libro. Aquí venimos en son de guerra, a ofrecerle patadas al árbol de cartón piedra de la historia oficial. Contaremos esta historia a nuestra forma, a fin de que todo el planeta la comprenda.
Felipe el Bello fue el primer rey de la dinastía de los Austria. Llegó a Castilla para reinar y se lo cargaron antes de resultar rey de Aragón. Más allá de que es un tipo esencial, entendemos poquísimo de él. Semeja que la historia oficial se ha saltado esta página.
A lo destacado es que se han olvidado un tanto a posta. El reinado de Felipe I es un fastidio, especialmente si comulgas con eso de que Isabel y Fernando unieron España. Por el hecho de que, veremos, en el momento en que muere Isabel, el trono de Castilla lo hereda su hija Juana. Fernando prosigue vivito y coleando en su trono de Aragón. Ahí es donde nos ronda la mosca tras la oreja. Por el hecho de que eso de que haya 2 reyes diferentes nos suena a que prosiguen estando 2 reinos: el de Castilla para Juana y el de Aragón para Fernando. El los pies en el suelo nos comunica que no: los reyes católicos no unieron España. ¿Va a ser de ahí que que Felipe el Precioso es tan molesto?
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