Esto no son las Torres Gemelas: Cómo aprender a leer la televisión y otras imágenes (RELECTURAS)

Parémonos un instante y pensemos cuántas imágenes hemos consumido en todo el día. Entre la propaganda que se amplía por la localidad, las series con las que nos entretenemos o las fotografías del periódico con el que pretendemos comprender lo que sucede a lo que nos rodea, las imágenes son probablemente el género de información mucho más fuerte que llega hasta nosotros. En oposición a lo que varios pensamos, estas imágenes tienen un papel central en nuestras vidas, por el hecho de que no solo narran o dicen, sino las imágenes hacen: nos hacen sentirnos mal, nos hacen ir al gimnasio, nos hacen enfadarnos con nuestra pareja por el hecho de que no cumple las esperanzas visuales que queremos, nos hacen odiar, chillar y, principalmente, nos hacen obtener. Debido al colosal poder que las producciones visuales tienen en nuestras vidas, este libro resalta la iniciativa de que todas y cada una de las imágenes tienen secuelas, secuelas tan esenciales como ganar una guerra —la guerra fría se ganó con la imagen del hombre estadounidense pisando la luna—, justificar otra —pensemos ahora mismo en las sensacionales imágenes de la caída de las Torres Gemelas— o contribuir el incremento de las muertes por crueldad de género. Y todas y cada una y todos entendemos por qué sucede esto