España negra

Sí, la manida expresión "España negra" viene de este libro. En él, Darío Regoyos nos traduce y transcribe las tétricas impresiones del enorme poeta belga Émile Verhaeren, tras un viaje de los dos por la península en 1888. Esas impresiones, Regoyos las funde y confunde con las suyas propias trasladadas al artículo y a unos espléndidos grabados y xilografías que, como es natural, se reproducen en nuestra edición. Pero, ¿qué es la "España negra"? ¿Es verdadera? ¿Existió verdaderamente? ¿Existe?... ¿Va a existir? ¿Proseguirá siempre y en todo momento estando y, por consiguiente, va a haber siempre y en todo momento una "España negra"? La contestación a todos estos problemas por fuerza debe ser efectiva. Existe, claro que hay la "España negra", como existe la de color rosa, la amarilla, la de charanga y pandereta, y todas las otras españas mucho más se deseen buscar. Por el hecho de que en niveles extensos siempre y en todo momento es simple tropezar con lo que uno busca. En cualquier caso, el caldo de cultivo para constatar en nuestro suelo un particular retardo con en comparación con resto de Europa está servido. Nos encontramos en la España donde se fragua el desastre colonial, la España del 98.

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