Escribir es infinito: (hasta cierto punto).

“Deberías buscar una actividad incesante en tu vida. Algo simple de efectuar, con independencia de tu estado anímico o sensible. Tú antes escribías, ¿no?”
- Mi psiquiatra.

Y de esta forma fue como comencé a redactar una oración cada día en el momento del desayuno. El contenido de este libro es una recopilación (con apariencia de microliteraturas: greguerías y algún adentrísmo) de los más destacados descubrimientos que me he ido encontrando en la práctica de tal ejercicio terapéutico-creativo.
A mí esto me salvó la vida. No quisiera que les provoque lo mismo a ustedes, naturalmente