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El tema relacionado con la pena capital es demasiado complejo y enrevesado y, como en la integridad de los inconvenientes de esta extensión ha concitado la atención y el análisis de intelectuales, políticos y cineastas, y las críticas estuvieron y están divididas entre simpatizantes y opositores de este género de penas.
El creador de este trabajo se decanta abiertamente a favor de la defensa de la vida y de la reprobación de la pena que tiene por finalidad la supresión de este derecho primordial de la gente. Para esto se dan a conocer de forma sistematizada las diferentes corrientes de opinión que tal medida concita, tanto desde el criterio ontológico como del pragmático, por el hecho de que a los razonamientos de las dos especies asisten las críticas sobre esto. Los datos estadísticos ponen en prueba que la app de la pena capital no afirma el desenlace de los asaltos delincuentes, no de los mucho más aterradores, que en todo tiempo han roto la pacífica convivencia popular.
Manuel Iglesias Cabero ingresó en la Carrera Judicial por oposición libre y ejercitó la jurisdicción a lo largo de 47 años, en las categorías de Juez de Primera Instancia y también Instrucción, en los Juzgados de Laguardia (Alava), Balmaseda (Vizcaya) y Durango (Vizcaya), Magistrado de Trabajo en Bilbao, Magistrado del Tribunal Central de Trabajo, Presidente de la Salón de lo Popular de la Audiencia Nacional y, al final, Magistrado de la Salón Cuarta del Tribunal Supremo.
El creador de este trabajo se decanta abiertamente a favor de la defensa de la vida y de la reprobación de la pena que tiene por finalidad la supresión de este derecho primordial de la gente. Para esto se dan a conocer de forma sistematizada las diferentes corrientes de opinión que tal medida concita, tanto desde el criterio ontológico como del pragmático, por el hecho de que a los razonamientos de las dos especies asisten las críticas sobre esto. Los datos estadísticos ponen en prueba que la app de la pena capital no afirma el desenlace de los asaltos delincuentes, no de los mucho más aterradores, que en todo tiempo han roto la pacífica convivencia popular.
Manuel Iglesias Cabero ingresó en la Carrera Judicial por oposición libre y ejercitó la jurisdicción a lo largo de 47 años, en las categorías de Juez de Primera Instancia y también Instrucción, en los Juzgados de Laguardia (Alava), Balmaseda (Vizcaya) y Durango (Vizcaya), Magistrado de Trabajo en Bilbao, Magistrado del Tribunal Central de Trabajo, Presidente de la Salón de lo Popular de la Audiencia Nacional y, al final, Magistrado de la Salón Cuarta del Tribunal Supremo.
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