El Príncipe Verde También Existe

Ana soy yo. Y tú. Y tu mejor amiga. Es hasta la chavala que va junto a ti en el autobús. No es Victoria Beckham pues Vicky es posh y divina y seguramente no tiene pitañas por las mañanas, pero es todas y cada una de las otras chicas de todo el mundo. Asimismo es la personaje principal de esta historia.

Ana es una chavala del montón, de las del montón enserio, sin un cuerpo de escándalo ni unas mechas de 300 euros, que en pocos meses pierde su negocio, al que pensaba que era el cariño de su historia, y que se ve obligada a admitir un trabajo de asesora en una compañía de algo que le resulta de interés tan poco que no sabe lo que es.

Pero lo que no pierde es su sentido del humor.

Acompañada de su mejores amigos y de otros muchos no tan amigos, inmersa en la organización de una boda y intentando de sobrepasar los óbices que la vida nos va poniendo, Ana se marcha abriendo sendero nuevamente (a codazos, sí, pero lo esencial es formar parte) para conocer que los príncipes no deben ser siempre y en todo momento azules. Asimismo tienen la posibilidad de ser verdes.