El primer senador de Roma: Carthago delenda est (Novela histórica)

En pleno siglo ii antes de Cristo, Roma es la máxima capacidad del Mediterráneo tras haber derrotado a la Cartago de Aníbal y a los poderosos reinos de Siria y Macedonia.

No obstante, más allá de su situación dominante, ahora nada basta para los integrantes de las familias senatoriales, así sean Escipiones, Claudios, Fabios, Licinios, Fulvios o Sulpicios. Arrastrados por el ansia de aumentar su prestigio por medio de gestas militares y la obtención del mayor número de honores y dignidades, no vacilan en servirse de intrigas, coaliciones y deslealtades para saciar apetitos y ambiciones personales.

Es el planeta, a la postre, de unos emergentes Escipión Emiliano y Apio Claudio Pulcro, o de unos jóvenes Tiberio y Cayo Sempronio Graco, nietos de Escipión Africano y también hijos de Cornelia, la comadrona ejemplar. Es, asimismo, el tiempo de un adulto mayor y ácido Marco Porcio Catón, quien en los estertores de su historia va a hacer popular el célebre «Carthago delenda est», Cartago ha de ser destruida.

Esta es la novela de todos ellos, esta es la excelente Historia de Roma.