La dignidad humana: Una manera de vivir

La dignidad es el bien supremo del humano. Pero, ¿exactamente en qué radica propiamente? Bieri examina con todo precaución y con una observación precisa hacia nuestras experiencias las distintas ocasiones en las que la percibimos, en tanto que en el fondo y particularmente hablamos de nuestra dignidad.

El pensamiento conductor sotiene que la dignidad no es una propiedad abstracta, metafísica, sino más bien un método y una forma de vivir nuestra vida y de enfrentar sus retos. Tiene relación a la forma en que nos tratan los otros y en de qué manera nos enlazamos con ellos y con nosotros. Lo que está en juego es nuestra autonomía, nuestra certeza, nuestro respeto por la privacidad y nuestra aptitud de encuentros auténticos. La manera en que Bieri charla de estos temas reúne la transparencia del pensamiento con la consistencia poética de la experiencia humana.

Nuestra vida como seres pensantes, vivientes y obrantes es frágil y está siempre y en todo momento conminada tanto desde dentro como desde fuera. La manera de vida de la dignidad es el intento de sostener en alerta esta amenaza. Hablamos de aguantar de modo autoconsciente nuestra vida siempre y en todo momento conminada. Lo que importa es no solo dejarse llevar por las cosas sufridas, sino más bien afrontarlas con una cierta actitud, que reza: yo acepto el desafío. La manera de vida de la dignidad no es, ya que, una manera de vida alguno, sino más bien la contestación existencial a la experiencia existencial de la amenaza.