Diccionario ilustrado BOE-español: Aprende el idioma que dicta las normas y sus recovecos (Ariel)

Ahora puedes ser superprofesional en inglés o estudiar chino que, si no controlas el lenguaje del Folleto Oficial del Estado, pringas. Este diccionario ilustrado traduce, directamente y clara, sin rimbombancias jurídicas, los conceptos que precisas comprender por el hecho de que, desees o no, lo que se publica en el BOE te perjudica. Y el libro lo enseña con retranca —va a haber que reírse por lo menos— y con una retahíla de ejemplos de abusos perpetrados por quienes sí comprenden, y bien, el lenguaje de la burocracia.
¿Por qué razón toda vez que un titular reza "el Gobierno aprueba tal ley" está mintiendo? ¿Qué ocurre si bajamos el lenguaje administrativo a lo diario y empleamos una cosa que lleva por nombre "predisposición derogatoria" para tumbar todo lo feo que hemos dicho hasta ese instante, de este modo de cuajo? ¿Qué es un decreto ley, de qué manera se ha utilizado y por qué razón de todos modos es un tanto como realizar trampas? ¿Por qué razón quienes nos rigen tienen esa manía de combinar el tocino con la agilidad en un mismo artículo legal? Todo está conectado, y las reglas son una confusión mucho más complicada que la pizarra de un detective estudiando a un asesino en serie. Pero si las comprendes, ni te pierdes ni te engañan.
Andas frente a un libro extraño, sí, que combina la aptitud de Eva Belmonte de comprender y traducir a los humanos el lenguaje del BOE con la visión aguda y sarcástica de las viñetas de Mauro Entrialgo.



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