No confundas: Principios esenciales para arder sin quemarnos y alumbrar sin gastarnos

Nos encontramos tan acostumbrados a la claridad del sol que no conocemos la riqueza de una noche estrellada. Es necesario, entonces, una de esas noches que se extienden mucho más de lo común, que nos sorprenden a destiempo o que se ciernen sobre nosotros en instantes inopinados, a fin de que tengamos la posibilidad ser abrazados por un anochecer que en comienzo semeja amenazante y en el final resulta admirable. En ocasiones es requisito que el brillante y accesible sol se lleve a cabo a un lado, entonces descubrimos que la noche está anegada de luz.
NO CONFUNDAS no persigue mucho más –ni tampoco menos– que 2 cosas primordiales: rememorar que la adversidad puede ser el envoltorio de la enorme ocasión y trasmitir claves fundamentales que nos dejen ser útiles sin ser usados, ser útil sin ser serviciales, iluminar sin quemarnos y relucir sin gastar.