Cinismo: Antístenes, Diógenes y Los Desencantados Actuales. (HISTORIA de la FILOSOFÍA.)

El cínico se siente inseguro en su planeta. Se edifican filosofías orientadas de manera inmediata a la alegría del sujeto. El individualismo empieza a ser solución de un humano quebrado y sometido. No hay fe en los viejos valores, es requisito detallar novedosas verdades. El cínico es el predicador de otras verdades, subversivas en frente de lo popular y a la tradición. El planeta es extraño y riguroso, el hombre es individualista y se resguarda y autoafirma en lo subjetivo para lograr el objetivo supremo: la alegría. Los helenos representaban en la figura del perro el impudor del animal. Eran llamados “perros” esos que no respetaban el decoro y la decencia, que renunciaban al aidós (sentido ética, respeto y vergüenza) abrazando la anaídeia (la bestia fría y franca). Accionar como la bestia, pero sin la inocencia animal, es un grave insulto para dioses y hombres.
Índice:
1.Introducción.
2.Contexto histórico y filosófico.
3.La desvergüenza de los insolentes.
4.Los insolentes.
5.Antístenes.
6.Diógenes.
7.Bibliografía.