Un ático con vistas

¿Quién mencionó que era preciso salir de casa para conseguir el cariño?

Una entretenida y entrañable comedia romántica.

¿Quién es el hombre que vive en el ático de la calle Cortázar, y por qué razón jamás se deja ver? Esa es el interrogante que tortura a la red social de vecinos del edificio 13. Incluida a Matty, que si bien no vive allí, conoce la historia de historia legendaria de Julian Bale y siempre y en todo momento lanza una observación curiosa a su ático desierto.

Un aviso en el tablón del bloque de pisos se presentará como la ocasión idónea para solucionar el secreto. Solo ella se va a atrever a adentrarse en la guarida del lobo, llevándose una sorpresa en el momento en que descubra a alguien muy distinto a eso que imaginaba.

En los weblogs...
«Un ático con vistas no solo es una novela romántica, sino a través de ella Eleanor dió voz a todas y cada una esas personas que, como el personaje principal, se ven sumidos en una situación traumática que te conduce a aislarte y alejarte del contacto humano sin poder evitarlo. Es una crítica a todas y cada una la gente que miran hacia otro lado, a la sociedad individualista donde vivimos, a de qué manera tenemos la posibilidad de llegar a desnaturalizar, criticar y evaluar el mal y las ocasiones extrañas en vez de brindarnos para contribuir a el resto.»
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