Aprender a leer: De las ciencias cognitivas al aula (Ciencia que ladra… serie Mayor)

Entre los 5 y los 7 años de edad, prácticamente todos los pequeños aprenden a leer. Si bien a los mayores esto nos parezca un hecho natural, hablamos de una auténtica proeza que causa una revolución en el cerebro. Stanislas Dehaene, personaje principal de los descubrimientos neurocientíficos mucho más esenciales, enseña las claves de la ciencia de la lectura y su puesta en práctica en la escuela, para orientar a los progenitores y los profesores, que acompañan a los pequeños en su hazaña.

Este libro detalla el desempeño del cerebro que lee, y enseña que estudiar a leer radica en tomar conciencia de las construcciones de la lengua oral y conectarlas de manera eficaz con el código visual de las letras. Alerta a la app de sus entendimientos en la escuela y en el campo familiar, Dehaene y su equipo no se limitan a un único procedimiento perfecto: proponen una secuencia de principios académicos que hacen más fácil el hallazgo de la lectura. De este modo, los juegos con los sonidos de las expresiones, tanto como la atención adecuadamente concentrada, dejan apresurar la automatización del desciframiento, y dejar en libertad elementos en la cabeza para dedicar a la entendimiento de los contenidos escritos. El progreso gradual, la variedad de ejemplos y la adaptación al nivel de los pequeños contribuyen a prosperar la enseñanza, garantizando la diversión en el sala. La clara y ágil explicación no pierde de vista las probables adversidades, como la adquisición de la lectura en medios desfavorecidos y asimismo la dislexia.

Con la convicción de que una política didáctica estricta y incitante para los profesores puede traer sus frutos, se muestran aquí vivencias triunfantes que aplicaron estas ideas y asimismo una orientación pedagógica fundamentada en las adversidades propias de nuestra lengua. Estudiar a leer asegura con creces que es deseable y viable atravesar el puente que transporta de los laboratorios a las salas.