El SEO ha muerto: cómo anunciarse en internet

Sí, el SEO está muerto.

Es bien difícil de admitir, tanto por aquellas compañías y expertos que hicieron a lo largo de varios años su negocio, como por esos causantes y dueños de webs, que prosiguen pensando que si aplican todas y cada una de las técnicas de “optimización SEO” y posicionamiento natural, su producto o web va a ser VISIBLE mostrándose en las primeras situaciones de los desenlaces de buscas o asimismo conocidas como SERPs (Search Engine Result Pages).

Hoy día, con los resultados de la búsqueda tan customizados y dependientes de cientos y cientos de componentes, es imposible entablar una clara correlación entre el empleo de ciertas técnicas y el incremento en el número de visitas y conversiones (a propósito que diríase que el CRO es el nuevo SEO, pero igual que para llevar a cabo SEO es necesario contenido, para llevar a cabo CRO hacen falta ventas, y para conseguir ventas , requerimos visitas que conseguiremos usando los diferentes sistemas de propaganda patrocinada que observaremos aquí).

2 personas geográficamente próximas, haciendo exactamente la misma búsqueda en Google plus por poner un ejemplo, consiguen diferentes desenlaces en relación -entre otros causantes-del dispositivo con el que se conecten, su navegador y su historial de navegación, si tienen sesión iniciada o no en algún servicio de Google plus.

La verdad es que el primordial elemento que ayuda al SEO, que hace aparente y visitada una página, es el contenido original, importante y calidad -como siempre y en todo momento hubo de ser por otro lado.

El resto de técnicas referentes a etiquetas, metadatos y las omnipresentes palabras clave, fueron perdiendo predominación real en frente de otros como la importancia popular por poner un ejemplo, el reconocimiento o ocasiones que un contenido o dirección de Internet se comparte en las comunidades, siendo estas además de esto los “nuevos buscadores web”, en el sentido de que reemplazan a estos como herramienta de ubicación y ingreso de contenidos, tanto por sus buscadores web internos –se prolonga poco a poco más la utilización de Youtube como buscador generalista- como por recomendación directa de los contactos de nuestra red (existe quien afirma aun que Whatsapp puede ser la próxima interfaz de publicación de contenidos).

Con todo lo mencionado no pretendo recomiendar el abandono de la optimización SEO, pero sí que en la próxima campaña de marketing digital, se considere la inversión en ciertos sistemas de propaganda patrocinada.

Me dejo rememorar el concepto de patrocinada: sustentada económicamente o pagada, y de inversión: gasto con el que aguardamos conseguir un beneficio mayor a la cantidad usada.

Si eres de los que consideras que estar empleando horas y horas en optimización SEO es mucho más económico que llevar a cabo una campaña de propaganda patrocinada, te solicitaría que calcularas el coste de adquisición de usuario o cliente con relación a esos elementos usados en mejorar los contenidos para su posicionamiento orgánico (si afirmas que no te ha costado nada por el hecho de que el trabajo de optimización lo hiciste tú mismo, no vale, tu tiempo si bien no lo reconozcas asimismo debe tener un valor en euros).

La solución ideal pasa como en tantas otras cosas, por un equilibrio entre las distinas opciones que contamos para anunciar una web y nuestros bienes y prestaciones, la utilización de los sistemas de propaganda patrocinada es indudablemente una alternativa a integrar en un Plan de marketing, y para esto es indispensable comprender qué opciones y herramientas contamos a nuestra predisposición.