PALABRAS DURAS EN LA BIBLIA. Y su interpretación espiritual (El Pozo de Siquem nº 352)

La Biblia forma parte al centro de la fe cristiana. Pero no en todos los casos es simple de comprender. Tanto en el Viejo Testamento como en el Nuevo podemos encontrar contenidos escritos oscuros y bien difíciles que nos tienen la posibilidad de intimidar, o páginas que nos causan y hasta nos indignan.

Varios leyentes se resisten a leer o oír las imprecaciones y maldiciones proferidas en el Viejo Testamento, o las expresiones amenazantes de Jesús en el Nuevo Testamento. Por otra parte, hay exegetas que interpretan las expresiones duras de la Biblia a su antojo, o les quitan hierro, con el objetivo de hacerlas compatibles con su teología.

No obstante, en una cáscara dura puede hallarse un fruto bello. Anselm Grün interpreta ciertos de estos contenidos escritos de una manera personal y comprometida. Y para esto se deja inspirar por san Agustín, que escribió: «La palabra de Dios es el contrincante de tu intención hasta el momento en que sea el origen de tu salvación. Mientras que prosigas siendo tu enemigo, la palabra de Dios va a ser tu enemigo. Sé tu amigo, y entonces la palabra de Dios concordará contigo». Si te tratas amistosamente, si llegas a ser amigo de ti, vas a ser uno con la palabra de Dios, que va a abrir tus ojos y te mostrará la imagen que Dios tiene de ti.

«Mis interpretaciones desean ser útil de estímulo a fin de que ingreses en lo personal en contacto con los contenidos escritos bíblicos y mires tu vida bajo su luz