El Silencio de los dioses (Las Crónicas de Móstur nº 1)

“Guardaos de perturbar el reposo de los dioses con vuestras injusticias, ya que su silencio es vuestra salvación. Así, no oséis impartir la justicia divina sobre nuestros semejantes, ya que esos que miran desde lo prominente charlarán expresiones que les van a llenar de miedo. Y entonces su poder va a caer sobre nosotros y arderéis eternamente en los fuegos de Mynthos, la Morada de los Inmortales”.
En las tierras de Móstur, la Orden Helvatia se erige como asegurador del culto a Athmer, dios de la luz. No obstante, se aproximan tiempos sombríos en los que la amenaza de la guerra y la sublevación de los nobles pone en riesgo la seguridad de la ciudad más importante y sus dominios.
Hay quienes quieren terminar con el reinado de los dioses, que semejan haber continuado bastante tiempo mudos. No obstante, su silencio es lo único que mantuvo a los hombres en una paz tan frágil como moribunda. Los Inmortales semejan en este momento prestos a charlar, y sus expresiones quizás no sean de amor o compasión.