Cómo luché contra ETA: De los años de plomo al caso Faisán (sociedad actual)

De héroe a villano: Los 30 años de pelea contra la banda armada del comisario Enrique Pamies,«Lleida», que trabajó bajo el mando del PSOE y del PP.

«La pelea antiterrorista piensa caminar descalzo por un filo que corta. En un lado está la legalidad y en el otro la ilegalidad. Para lograr seguir, unas ocasiones hay que respaldar el pie en entre los lados y otras en el otro. Es patraña que solo con el Estado de derecho se termina con el terrorismo. Quien afirme lo opuesto falta a la realidad o no sabe de lo que charla.»
Esta reflexión la efectuó el comisario jubilado Enrique Pamies, apodado «Lleida», jefe superior de Policía del País Vasco en el instante en el que ETA fue derrotada. Estuvo designado en esa red social treinta años, siempre y en todo momento en primera línea de pelea. El policía al que la situacion Faisán forzó a jubilarse de manera adelantada, cuenta por vez primera lo que vivió en esas décadas de sangre y heroísmo, de angustia y llanto, de trabajo incansable y de gravísimas renuncias personales.
Los autores no quieren redactar la crónica de la pelea contra ETA, no dividen carnets de héroes o de villanos, no procuran seducir a absolutamente nadie de que Pamies derrotó a la banda, o que sin su trabajo nunca se hubiese logrado… Solo garantizan que lo que aquí se cuenta ocurrió. Cuando menos, de esta forma lo vivió el personaje principal. Un material inédito que va a levantar urticaria entre ciertos biempensantes pero que resulta preciso para comprender mejor la pelea contra el terrorismo etarra que dejó 3000 atentados, 864 fallecidos y mucho más de 7000 víctimas.
«Me han acusado de ser un hombre de Alfredo Pérez Rubalcaba. Sí, lo fuí y a mucha honra. Como asimismo fué un honor ser un hombre de Antonio Camacho, de José Antonio Alonso, de Ángel Acebes, de Mariano Rajoy, de Jaime Mayor Oreja, de Jorge Fernández Díaz, de Juan Alberto Belloch, de Antonio Asunción, de José Luis Corcuera o de José Barrionuevo.»