50 cosas sobre mí (Periscopio)

Recientemente le salvé la vida a un tío. Dicho de esta forma, ahora sé que suena un tanto fuerte. Pero es cierto. En ocasiones la realidad es fuerte. El tío al que le salvé la vida tiene un par de años mucho más que yo y me cae mortal. Bueno, es posible que desde lo que pasó me caiga un tanto mejor, pero solo un tanto. De todos modos no lo sé. No sería su amigo por nada de todo el mundo. Seguramente les estáis preguntando qué sucedió, qué hice. Igual me imagináis como un héroe. Alguien que va por ahí salvando vidas o salvando mundos. O que transporta cubierta y una «S» muy grande en la remera. No les rayéis. Soy un tío como todos, pero mucho más extraño. Pienso que si no fuese extraño las cosas habrían sido diferentes. De aquella madrugada solamente tengo recuerdos limpios. Todo fue cuestión de tres o 4 segundos. Solamente tuve tiempo de meditar, pero sí de formularme una pregunta horrible: «¿Y si no hago nada?».